L@s narcisistas son normalmente jardineros de almas. L@s Narcisistas son jardineros.  Siempre están sembrando, aunque la principal diferencia con los jardineros es que los jardineros siembran flores y l@s narcisistas siembran relaciones personales. Cuando l@s trastornad@s empiezan a desarrollarse y de forma inconsciente sienten que necesitan a otro ser humano cerca para poder robarle sus emociones, sentimientos y energía, empiezan a cultivar en sus tierras relaciones personales.

 

Van poco a poco regando sus relaciones, gota a gota, día tras día… Unas relaciones florecen y otras relaciones no llegan a germinar. Al cabo del tiempo van arrancando la flor que más les gusta para llevársela a eventos, ponérsela en el bolsillo de la chaqueta o a modo folclórico en su oreja, pero nunca dejan de regar y cuidar su campo de flores. Cuando la flor o el ramo que han arrancado pierde su brillo, su color o, simplemente, se aburren de él es cuando lo tiran a la basura y recogen una flor de su cosecha que tenga una nueva luz, un nuevo brillo otra energía vital diferente.

 

Para l@s averiados cerebrales, los humanos somos como una flor que han cultivado y creen que es su pertenencia. Los trastornad@s arrancan el humano de su jardín y cuando el humano no les interesa lo descartan tirándolo a la papelera. L@s Narcisistas tienen un jardín de humanos, ningún humano para ell@s es especial, solo cogen el humano que le viene bien para cada momento sin contar con sus sentimientos, necesidades o emociones. L@s Narcisistas son JARDINEROS de ALMAS y nunca renunciarán a su jardín personal.Los narcisistas nunca son fieles en sus relaciones. Sus infidelidades son continuas desde el principio, desde el minuto uno de la relación.

 

De algunas de sus infidelidades te darás cuenta. Es más, el narcisista procura, de manera encubierta e indirecta, que descubras o que sospeches que te está siendo infiel. Es parte de su juego manipulador. De otras muchas, en cambio, no te enteraras nunca. Ell@s no respetan la palabra dada, son extremadamente egocéntricos, sólo son fieles a sí mismos. Les estimula llevar una doble y triple vida, y guardan muchas cartas para utilizar en momentos cruciales de la relación.

 

A través de comentarios o mensajes, ausencias que no explican, objetos dejados al “azar”, mensajes que llegan de repente y la victima ve, siembran en la víctima la duda sobre la existencia de otras personas en medio de la relación. De ese modo, torturan, hacen que su victima se vuelva insegura o desconfiada, que se pregunte: «¿Será que ya no le gusto?», «¿Será que estoy haciendo mal las cosas?», etc., y la incitan, indirectamente, a que investigue lo que sucede. Si siempre has sido una persona confiada en la relación y de repente te encuentras siendo un detective, algo no esta funcionando.

 

Cuando llega el descarte, es decir, cuando al jardinero ya se le haya secado su flor, por maltratarla, no regarla, utilizarla para fines superficiales o descuidarla, es posible que descubras que la persona que te ha sustituido, ha mantenido con él o ella una relación en paralelo, a menudo desde hace meses e incluso años. Por eso, el cambio ha sido inmediato, sin tiempo de espera, ni duelos. Tenían ya otra flor en su jardín para poder arrancar cuando hiciera falta.

No estas sol@

Psicopsiquis somos tod@s