Yo acababa de mudarme sola a una casita en un precioso pueblo de la sierra. Él fue el técnico
que me instaló internet. Con la excusa de que en la tv no iba bien internet me escribió esa
misma noche y quedamos para que me lo arreglara ese fin de semana (me dijo que si llamaba
a la compañía me cobrarían). Después fuimos a tomar algo. Parecía que teníamos muchas
cosas en común. Me dijo que había sido de la policía secreta, y empezó a contarme historias
inverosímiles de cuando era escolta en Sudamérica, de famosos que conoció…. Me contó que
era huérfano, y que estaba solo en España (no era de aquí), con su hijo pequeño. Su ex le había
denunciado por violencia de género, solo porque él le insultó (dijo). Poco a poco fui
descubriendo que no tenía realmente amigos, me dijo que “era muy difícil” y solía acabar mal
con la gente, salvo con sus ex novias. Aunque muy pocas veces se había enamorado, decía que
no sabía estar solo.

Me sorprendió que en la calle me cogiera de la mano, tan pronto. Esa misma noche nos
acostamos. Me dijo que quería una relación estable y monógama, y que no le gustaba tener
sexo con preservativo, así que dejamos de usarlo. Al principio era súper atento, me ayudó
mucho con los arreglillos de la casa, se preocupaba porque comiera bien (porque estoy muy
delgada)…Me dijo que él podía hacerme muchos favores, igual que yo a él. Yo no conocía a
nadie allí todavía, pero él me decía que le conocía a él, que vivía en otro pueblo cerca del mío
(o eso me dijo, porque ni me presentó a sus amigos ni me llevó nunca a su casa -me dijo que
compartía piso y que no se aceptaban visitas-, pero le pillé en muchas mentiras –que luego
negaba que hubiera dicho- así que ya no sé si era verdad).

Yo le dije que a mí no me gustaban las relaciones demasiado serias, que me agobiaba si
estaban muy encima de mí, que me gustaba mi libertad. No sé si fue por esto pero empezó a
decirme que no quería compromiso, que no sabía lo que quería, y empezó a parecer
inaccesible. Yo intenté dejarlo varias veces, pero me escribía o le escribía. Me preguntó si al
menos podíamos ser amigos así que seguimos viéndonos…y enrollándonos. Como soy bastante
fuerte y optimista (aunque muy sensible, hasta creo que soy PAS) le dije que entonces iba a
empezar a ver a otras personas. No le gustó. Me amenazaba diciéndome que él tenía a otras
detrás y que me atuviera a las consecuencias. “De broma” me dijo que “lo suyo era suyo”, y
que no le gustaba compartirlo. Empezó a volverse celoso y controlador. A veces me decía que
estábamos saliendo, otras que solo éramos amigos. Una vez me dijo que yo estaba a prueba,
“de broma”. Pero se comportaba como si fuera mi novio, salvo por whatsapp. Tardaba en
contestarme, a veces me dejaba en visto y otras no me hablaba en un par de días (cuando
quedaba con un amigo mío especialmente, creo que me castigaba porque quedaba con él).
También creo que provocaba las discusiones cuando me veía contenta. Si me arreglaba mucho,
o me echaba un perfume nuevo me decía que estaba muy guapa pero que no podía ser.
Además a veces se reía de mi forma de vestir o de pensar. A todo esto, con la excusa de una
apuesta, yo estaba invitándole a todo. Y cuando venía a mi casa le encantaba que yo le
acariciara, que le hiciera masajes, que tuviera la cena lista…Decía que le encantaba que le
“sirvieran”, pero él no hacía nada. En el sexo era muy egoísta, me sentía casi violada. Ni
siquiera me besaba. Una vez me dijo que no quería enamorarse porque entonces el poder lo
tendría yo.

Después de dos meses intensos un día le dije que iba a quedar con un amigo con el que había
estado hacía tiempo (para ver si así reaccionaba, porque yo ya estaba loca por él, pero no
podía irme ni él dejaba que lo hiciera). Un par de días después me escribió y me dijo que mejor
que no nos viéramos más, y sin prácticamente más explicación me bloqueó. No contestó a mis
sms salvo para decirme que a lo mejor se iba a vivir a otra ciudad. Fue una tortura. Esto duró
un mes, hasta que quedamos y me dijo que es que no quería hacerme daño. Le dije que
entonces no me bloqueara, pero no entendía que el dejarlo de esa forma tan cruel me hiciera
sentir mal. Acabé acostándome con él porque insistió, como despedida. Fue increíblemente
apasionado. A la semana siguiente volvió a pasar lo mismo, pero me dijo que no podía, que yo
era una chica muy maja y se fue. Después estuvimos tiempo sin hablarnos hasta que un día me
escribe para pedirme que le alquilara un piso que yo tenía vacío a unos amigos suyos sin
papeles, pero a su nombre. Le dije que no pero ya no me bloqueó.

Después de unos tres meses retomamos el contacto y empezamos a enrollarnos de nuevo. Le
invité a una barbacoa en mi casa. Cual no fue mi sorpresa cuando empezó a tontear con mis
dos únicas amigas en el pueblo, con quien estaba muy unida, hasta el punto de cogerlas por la
cintura y hacerles cosquillas. Pero no reaccioné mal como creo que él quería, porque le vi
sonriéndome de una forma muy extraña. Más tarde, cuando le pregunté me dijo que solo
éramos amigos, y que él solo había sido amable. Pero entonces empezó a contarme que si
había ayudado a su ex con la mudanza (pero que estuviera tranquila que se iba a vivir fuera),
que si una clienta le escribía aunque no le gustaba, que si otra le había regalado no sé qué. Así,
todo junto….Y finalmente me dice que le gustó una de mis amigas (como 20 años menor que
yo y muy gordita, es decir, totalmente opuesta a mí).. A pesar de eso, seguí viéndole. Esa
semana íbamos a quedar una noche y no se presentó, ni tenía el teléfono operativo. Me pasé
horas esperándole. Al día siguiente me llama (cuando casi nunca lo hacía) y me dice que le
habían detenido por lo de su ex (después un asistente social me dijo que no te pueden detener
por un insulto), y un par de días después me vuelve a decir que si le alquilaba mi piso, que se
quería mudar. Le dije que no estaba segura y me contestó que él no estaba enfadado, que era
yo que estaba resentida. Entonces exploté. Le dije que era un narcisista (aún sin saber del
trastorno) y todo lo que me había hecho sentir. Me contestó que lo sentía, que no había sido
su intención y que me fuera bien. Tal cual. Me bloqueó y hace 11 meses que no he vuelto a
saber nada de él, salvo por mi amiga, a quien escribió para quedar. Solo le preguntó por mí
para saber si seguíamos teniendo contacto.